¿Cuánto tiempo llevamos oyendo hablar de conciliación familiar como si fuera un reto o una aspiración difícil de alcanzar, por no decir inalcanzable? Sin embargo, la conciliación familiar sí que es posible, aunque requiere esfuerzo; un esfuerzo que merece la pena.
¿Qué es la conciliación familiar?
La conciliación familiar es la relación entre tu trabajo y las otras cosas importantes en tu vida, como la familia, el deporte y la vida social, las tareas del hogar, los compromisos sociales, etc.
Cuando hablamos de conciliación familiar nos referimos al equilibrio saludable entre la vida laboral y personal. Este equilibrio beneficia tanto a los peques como a sus padres.
Una vida familiar bien equilibrada también puede ayudar a las madres y a los padres a disfrutar la vida, controlar el estrés y prevenir el agotamiento en el trabajo. Sin embargo, requiere realizar cambios y adaptarse a las necesidades de todos los miembros de la familia.
Cuando existe un buen equilibrio entre el trabajo y la vida, es más probable contar con la energía mental y emocional para brindar a los peques la atención que necesitan.
¿Por qué es importante la conciliación familiar?
Los beneficios de priorizar el equilibrio entre la vida laboral y personal incluyen mayor productividad, mayor compromiso laboral y menor estrés, así como más tiempo para dedicarlo a actividades de ocio. Esto es, precisamente, lo que permite mejorar la productividad y tener una mejor salud, tanto física como mental.
Además, las personas que son capaces de encontrar un equilibrio saludable entre el trabajo y su vida personal son generalmente más felices, están más concentradas durante la jornada laboral y son menos propensas a ausentarse en el trabajo.
Por otra parte, no conseguir la conciliación familiar puede tener efectos negativos que afectan no solo a la productividad laboral, sino también a la salud, la economía e incluso a la estructura social.
Consejos e ideas para una buena conciliación familiar
Cambiar los hábitos de trabajo para apoyar el equilibrio entre el trabajo y la vida familiar no siempre es fácil. De hecho, no siempre es posible pasar menos tiempo en el trabajo, pero pequeños cambios pueden ayudar.
La conciliación familiar requiere tiempo y dedicación. El objetivo es encontrar un equilibrio saludable que funcione para cada familia. Hay muchas estrategias diferentes para lograr este equilibrio. Algunas de estas estrategias incluyen lo siguiente:
- Limita las actividades no esenciales y optimiza el tiempo para sacar más oportunidades para tu familia.
- Aprende cuándo decir “no” a la hora de aumentar las horas dedicadas al trabajo y otras actividades si esto compromete el tiempo que se dedica a la familia. Esto incluye también las modificaciones de horarios y adquirir compromisos que impliquen llevarse trabajo a casa.
- Establece límites y desconecta. Es importante establecer límites sobre tu disponibilidad fuera del horario laboral y dejar el trabajo en la oficina. La desconexión digital en tu tiempo libre es muy necesaria para poder prestar atención a tus peques.
- Intenta ajustar tu horario. La clave para mejorar el equilibrio entre el trabajo y la vida es asegurarse de que haya suficiente espacio para ambos en la agenda. Planificar tu tiempo libre con tus peques te ayudará a darte cuenta de cuánto tiempo les dedicas y a respetar el tiempo que les vayas a dedicar.
- Comunica tus necesidades a la empresa para buscar una solución que te permita conciliar tu vida laboral con tu vida personal. Algunas cosas que se pueden estudiar incluyen una reducción de jornada, la flexibilidad horaria o, incluso, flexibilidad espacial y teletrabajo, entre otras.
- Si teletrabajas, define y delimita tu espacio y tu tiempo de trabajo. Uno de los retos más difíciles del teletrabajo recae en la diferenciación de tiempos y espacios. Por eso, es importante adecuar un espacio de trabajo y un horario, respetarlo y hacerlo respetar.
Tiempo de calidad para toda la familia
Se habla mucho de que los peques necesitan tiempo de calidad con sus padres, pero también los padres necesitan tiempo de calidad con sus peques; tiempo para jugar, hablar, conocerse y descubrir. Esto hace que los beneficios de la conciliación familiar tengan mucha más trascendencia y superen las cuestiones relacionadas con la productividad laboral, la salud y el bienestar.
Pero, a pesar de sus beneficios, la conciliación familiar no suele ser fácil. No existe un enfoque único para todos. Por ello, desde Beeloom queremos ayudarte a encontrar soluciones específicas, según tus propias necesidades, para cumplir con tus compromisos familiares y tus responsabilidades laborales. Y todo ello sin perder de vista que tan importante es trabajar como pasar tiempo con tu familia.
¡Hasta la próxima Beeloomer!