Cuando el calor aprieta, no hay nada más refrescante que un buen helado. Pero, ¿son realmente saludables los que compramos en grandes superficies o tiendas especializadas?
Si queremos estar seguros que tanto nuestros hijos como nosotros disfrutamos de helados 100% naturales, sin aditivos, colorantes o potenciadores del sabor, nada mejor que realizar nuestros propios helados caseros, y si son de fruta natural, ¡mucho mejor!
Descubre cómo realizar 5 tipos de helados caseros, de forma muy sencilla, para que su merienda o postre más refrescante sea realmente saludable y divertida.
¡Toma nota!
¿Qué contienen realmente los helados industriales?
Aunque en ocasiones pueden parecer realmente apetitosos y muy naturales, debemos tener en cuenta que son una de las propuestas menos saludables que se pueden consumir, ya que acostumbran a contener aditivos industriales, grandes cantidades de azúcar y grasas perjudiciales.
A diferencia de los helados caseros, los helados industriales contienen ingredientes como leche, grasa, emulsionantes, estabilizantes y aromas añadidos.
Además, la calidad de este tipo de helados es inferior a la de los helados caseros porque hay mucha cantidad de aire que provoca una dispersión del sabor original.
Diferencias entre helados artesanales e industriales
En esencia, los helados artesanales cuentan con muchas ventajas respecto a los industriales: en primer lugar encontramos la calidad, ya que los artesanales están hechos con productos frescos y tienen menos grasas, por lo que las calorías son también menores, la consistencia es más cremosa y no contienen colorantes, conservantes o esencias.
Recetas de helados caseros
Te invitamos a descubrir con Beeloom algunas recetas de helados caseros muy saludables y fáciles de preparar, para cocinar en familia.
Helado casero tipo polo
Los helados caseros tipo polo o helados de hielo son muy económicos, refrescantes y fáciles de preparar, casi como un juego de niños.
Es tan sencillo como utilizar zumos caseros, refrescos o algún tipo de bebidas vegetales como la horchata, por ejemplo, añadirlos a un molde en forma de polo con una barrita para poder cogerlo y, ¡al congelador! En tan solo unas horas tendremos el helado listo para consumir.
Si además queremos que sean totalmente saludables es preferible utilizar ingredientes que no contengan azúcar o utilizar fruta entera batida mezclada con agua.
Helado casero de chocolate sin clara de huevo
Aunque es probable que no seamos conscientes de ello, para hacer helados caseros es habitual añadir huevo. El huevo espesa la mezcla para darle una textura más cremosa.
A pesar de ello, es posible hacer este tipo de helados sin utilizar huevo, sustituyéndolo por algún tipo de almidón tipo maizena.
Toma nota de los ingredientes y la preparación y disfruta del mejor helado casero sin huevo:
Ingredientes:
- 250 g de leche entera
- 240 g de nata líquida para montar
- 250 g de leche evaporada
- 140 g de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- Un pellizco de sal
- 4 cucharadas. de Maizena
- 140 g de chocolate fondant negro (o con leche, si lo prefieres)
- 1 cucharada de cacao en polvo
Realización paso a paso:
- Añade la Maizena a 100 ml de leche fría para hidratarla. Remueve hasta que no haya grumos y reserva.
- En un cazo añade el resto de la leche, junto a la leche evaporada, la nata, el azúcar o edulcorante que prefieras y la sal. En cuanto hayas terminado pon el cazo al fuego.
- Calienta suavemente y remueve hasta que hierva con unas varillas. En cuanto empiece a hervir calcula un par de minutos antes de retirarlo del fuego. Reserva.
- Funde el chocolate en un bol. Pude hacerlo al baño maría o en el microondas.
- Añade el cacao en polvo y remueve bien.
- Agrega este contenido en el bol reservado y mezcla bien a fuego lento.
- Apaga el fuego y añade el extracto de vainilla.
- Si ves que ha quedado algún grumo te recomendamos que utilices una batidora de mano.
En cuanto lo tengas deberás tapar la mezcla con un papel film, esperar a que esté frío y ponerlo en la nevera.
Si tienes heladera puedes utilizarla cuando la mezcla esté bien fría, preferiblemente un día después de haberla hecho y haberla tenido en la nevera toda la noche. Con la heladera conseguirás tener el helado en poco más de 10 minutos para ponerlo posteriormente en el congelador, donde acabará de ponerse firme.
¡Y listo! Ya tienes tu helado casero de chocolate sin huevo, perfecto para disfrutar con tus hijos.
Helado casero de yogur natural
Se trata de uno de los helados caseros más fáciles de hacer en casa. Tan solo necesitarás dos ingredientes esenciales, aunque puedes añadir muchos otros ingredientes frescos y saludables para jugar con los sabores.
En esta ocasión te presentamos la receta del helado casero de yogur natural sin otros ingredientes, pero las posibilidades son casi ilimitadas.
Ingredientes:
- 575 gramos de yogur griego
- 30 gramos de miel de flores
- 1 cucharadita de vainilla
Preparación
- Vierte los yogures en una jarra, sin el suero, y añade la miel y la vainilla. Si el yogur no es azucarado es preferible que añadas el doble de miel, si es azucarado tendrás suficiente con la cantidad indicada.
- Remueve con unas varillas hasta conseguir una crema homogénea y ligera.
- Añade la mezcla a un recipiente que pueda ir al congelador y congela.
- Si no tienes heladera,tendrás que remover cada cierto tiempo mientras que si la tienes, tan sólo deberás verterlo en ella para que se haga, en tan solo 20 minutos.
Fácil, rápido y ¡delicioso!
Sorbete de sandía casero
La sandía es una de las frutas más refrescantes y saludables del verano, por lo que, ¡es perfecta para disfrutar de un delicioso sorbete!
Ingredientes
- 500 gramos de sandía limpia y sin pepitas
- 125 ml de agua
- 60 gr de azúcar
- 2 cucharadas de zumo de limón
- Una pizca de sal
Preparación paso a paso
- Añade el agua y el azúcar en un cazo y remuévelo para que los dos ingredientes se mezclen. Llévalo a ebullición. En cuanto empiece a hervir calcula dos minutos y retíralo del fuego. Traspasa este almíbar a otro recipiente para que se enfríe más rápidamente.
- Tritura la sandía, añade el zumo de limón y la pizca de sal. En cuanto lo tengas añade el almíbar.
- Incorpora la mezcla a un recipiente para el congelador y congela durante unas horas, removiendo de vez en cuando. Al contener almíbar no se cristalizará, pero es imprescindible que lo remuevas algunas veces, utilizando un tenedor.
En cuanto esté congelado tendrás a punto un delicioso sorbete de sandía, uno de los helados caseros más apetitosos y refrescantes que te ayudarán a pasar mejor el calor asfixiante del verano.